Un triste adiós a Sempé
Un señor pasea por la playa con su perro. El rastro de las huellas nos hace darnos cuenta de que la armonía de sus paseos es sólo aparente. Mientras las huellas del señor avanzan en línea recta, las del perro describen curvas y bucles infinitos.
Sempé fue un maestro absoluto del detalle, de lo sutil, y ello se plasmaba invariablemente en la descripción gráfica de sus perros. Perros y amos que se reflejan, ademanes expresivos, colas que se agitan de alegría… Los perros de Sempé reclaman su independencia y viven en una estrecha relación con un mundo humano del que son tan protagonistas como sus dueños. Ni a unos ni a otros les hacen falta palabras para comprenderse. En fin… tanta explicación para deciros que Sempé ha muerto, ¡Menuda pérdida!
