Jornada de reflexión

Democracia desde la papelera

Cada cual sabrá lo que hace, pero todos somos conscientes de que cuando las propuestas de los partidos políticos recurren a la retórica de la eliminación, acabamos encaminándonos – de uno u otro modo – hacia el totalitarismo. Cuando determinadas corrientes ideológicas anuncian tirar a la papelera todo lo que su marketing dicta como enemigo, los ciudadanos y las ciudadanas hemos de tener muy claro que mirar para otro lado o no asumir nuestra responsabilidad democrática, puede salirle muy caro a nuestra sociedad. Quien, entre otras muchas cosas, anuncia que va a tirar a la basura toda la Agenda 2030 en su conjunto está proponiendo la sociedad de la fuerza y el fin de la solidaridad, el fin de la lucha contra el deterioro medioambiental, el fin de la educación en libertad, etc., etc., etc. Si contribuimos a que el destino político de nuestro país sea esa papelera, estamos apañados. En esa papelera, no lo olvidemos, unos de los primeros que van a caer son los animales y quienes los defienden. Y así galgos, toros, colonias felinas, perros, gatos, veganos o ecologistas están llamados a ocupar el fondo de ese recipiente, al lado de los restos de sacapuntas y de los chicles pegados. La democracia que impone la eliminación es un anuncio del fin de la democracia. En nuestra mano (léase, en nuestro voto), está la capacidad para frenar esta corrupción imparable de nuestro sistema de libertades o contribuir definitivamente a afirmarlo.