Carta a un niño responsable

Familia, vacaciones y gatos

Querido Rodrigo,

                           Te escribo a ti, en representación de todos los niños de España, para desearte las mejores de las vacaciones. Me consta que el año ha sido muy largo y que has trabajado muy duro para poder aprobar todas las asignaturas y poder llegar “limpio” a junio. Sé que lo has conseguido y, por ello, te doy mi enhorabuena. Me he enterado de que este verano acudirás a dos estupendos campamentos, uno de surf y otro de naturaleza y, conociéndote, sé que lo vas a pasar mejor que nadie. También sé que se lo van a pasar fenomenal contigo… ¡Menudo eres! Luego irás a la costa con los papis, a las fiestas del pueblo… y a no sé cuántos sitios más. 

                               Ahora bien, en ese tiempo, recuerda que Miko, tu gatito, no entiende lo que son las vacaciones… Seguro que vais a estar de aquí para allá y eso a él le despista y le estresa. Tú, que eres un chico muy responsable, tienes que comprometerte a cuidarle este tiempo lo más posible, y entre toda la familia tenéis que poneros de acuerdo para que vuestras actividades le afecten lo mínimo. Si os desplazáis a otro entorno con él, se puede despistar y perderse. Tampoco podéis dejarlo mucho solo sin atención. No podéis dejarlo desatendido en un lugar desconocido porque se puede estresar y reaccionar raro. En definitiva, cuando planeéis las vacaciones, tenéis que pensar en Miko como un miembro más de la familia y, por tanto, habrá cosas que podréis hacer y cosas que no.

                               Si te digo esto, Rodrigo, es porque seguramente no sepas que, cada año, en verano, miles de familias españolas pierden o abandonan a sus gatos, provocando en ellos mucho sufrimiento: accidentes, atropellos, hambre, parásitos… Son decenas de miles los gatos que cada año son recogidos por las protectoras o que acaban formando parte de colonias felinas, porque se han quedado a vivir para siempre en la calle.

                               Yo sé muy bien, Rodrigo, que eso no va a ocurrir contigo, porque eres un chico responsable, que siempre se ha dedicado con toda el alma a cuidar de su gatito. No dejes de hablar de esto con los amigos tuyos que también tienen gato, porque ellos también han de portarse.

                               Nada más. Sólo me queda desearte lo mejor para estas vacaciones y que recuperes fuerzas para el curso que viene… aunque para eso… aún queda mucho mucho tiempo.

                               Tu amiga,

                                                               Raquel